
Lloret de Mar - Vidreres - Sils - Tordera - Blanes - Lloret de Mar
Lloret de Mar - Vidreres - Sils - Tordera - Blanes - Lloret de Mar
Distancia:
54 km
Desnivel positivo:
470 m
Altitud máx.:
190 m
Esta ruta nos lleva desde las aguas cristalinas de la Costa Brava hasta el interior más tranquilo, combinando carreteras rápidas, subidas suaves y paisajes variados. Desde Lloret de Mar, nos adentramos en el encanto rural de la Selva, rodando por carreteras secundarias rodeadas de campos y bosques. El regreso nos regala un final espectacular por la GI-682, una carretera serpenteante con vistas de postal sobre el Mediterráneo. Un recorrido equilibrado, con kilometraje asequible y suficientes tramos para disfrutar tanto del ritmo como de las vistas.

Iniciamos la ruta desde la Oficina de Turismo Central de Lloret de Mar, situada en la calle Alegries, 3. Salimos en dirección este, cruzando el municipio y enfilando la carretera GI-682 hacia Tossa de Mar.
Salimos de Lloret por la GIP-5121, una carretera tranquila que nos conduce hacia Vidreres. Este primer tramo nos permite calentar las piernas con un terreno ondulado, atravesando zonas boscosas y rurales con poco tráfico. A medida que avanzamos, disfrutamos de la transición del paisaje: de los escarpados acantilados de la Costa Brava en las primeras llanuras interiores, con campos de cultivo y masías dispersas. Llegamos a Vidreres, un municipio de interior con un ambiente acogedor y un buen punto para realizar una breve parada si es necesario.
Dejamos Vidreres atrás y nos incorporamos a la C-63, en dirección a Sils. Esta sección de la ruta se caracteriza por ser más plana y rápida, ideal para mantener un buen ritmo antes de los tramos más exigentes de la jornada. El pedalear aquí se hace fluido, rodeado de un paisaje tranquilo donde destaca el lago de Sils, un antiguo humedal con gran valor ecológico y refugio de aves migratorias.
Al salir de Sils, seguimos por la GI-555 hacia Tordera, una carretera secundaria que transcurre por zonas agrícolas y bosques mediterráneos. Este tramo ofrece un terreno cómodo, perfecto para rodar en grupo, y permite disfrutar de la típica combinación de bosques de encinas y campos de cultivo tan característica de esta zona.
Llegados a Tordera, nos desviamos por la GI-600 en dirección a Blanes. Aquí encontramos algunas subidas moderadas que añaden un punto de dificultad pero también nos regalan buenas vistas panorámicas del paisaje costero. La entrada a Blanes es especialmente agradable, con el mar al fondo y la silueta inconfundible de Sa Palomera, la gran roca que marca el inicio de la Costa Brava.
El último segmento de la ruta nos lleva de Blanes a Lloret de Mar por la GI-682, una carretera conocida por sus curvas y vistas espectaculares sobre el mar. Este tramo, pese a no ser largo, presenta subidas y bajadas constantes que ponen a prueba las piernas después de los kilómetros acumulados.
Por último, llegamos nuevamente a Lloret de Mar, completando una ruta variada que combina carreteras interiores con tramos costeros, ofreciendo una experiencia completa para los amantes del ciclismo.
Lugares de interés turístico
Estanque de Sils: Antiguo humedal de alto valor ecológico, situado en la llanura de la Selva. Hoy en día, es una de las zonas húmedas más importantes de Cataluña, un hábitat natural que alberga numerosas especies de aves migratorias y que destaca por su interés paisajístico y ambiental.